Salud infantil
1.- Aportes actividad deportiva manteniendo la salud
2.- Estímulo del Sistema Inmunitario
3.- Desarrollo y potenciación del sistema nervioso
4.- Control del desarrollo de altura y peso
1.- APORTES ACTUACIÓN DEPORTIVA MANTENIENDO LA SALUD
Es fundamental una correcta alimentación que no prive de ningún nutriente el proceso de desarrollo de los niños. Para ello hablamos, como base, de una dieta mediterránea, pero, la actividad física y el deporte también son fundamentales para el desarrollo físico, psíquico y emocional de los niños.
En el desarrollo del deporte el cuerpo tiene un consumo extra de nutrientes, cosa que hemos de tener en cuenta para que no vaya en detrimento del aporte básico para mantener la salud. Por ello aconsejamos, dependiendo de la fase de desarrollo, un aporte que no entre en fase carencial, es decir, realizar deporte saludable manteniendo la salud.
2.- SISTEMA INMUNITARIO
Los niños en su desarrollo se enfrentan a múltiples virus y bacterias que ayudan a tener una defensa específica para los mismos creando a su vez un sistema inmunitario fuerte que le servirá para toda su vida.
Cada resfriado es una vacuna para los niños. El problema es cuando no acaba de responder bien el sistema inmune y se complica con bronquiolitis o asma infantil o cuando presenta resfriados de repetición que repercute en el crecimiento del niño/a. Por ello es importantísimo estimular la correcta respuesta de las defensas o modularla, dependiendo de la circunstancia de cada uno, con elementos como la equinácea propóleo, zinc o vitamina D.
En nuestra clínica realizamos un estudio personalizado de cada niño, valorando la evolución que ha tenido, aconsejando a los padres el adecuado tratamiento para que tenga un buen desarrollo inmunitario.
3.- DESARROLLO Y POTENCIACIÓN DEL SISTEMA NERVIOSO
El sistema nervioso no sólo se desarrolla durante el embarazo, si no que en los 8 primeros años de vida hay un crecimiento exponencial en capacidad y funciones. Es una etapa crítica en la persona pues depende de que tenga el sustento necesario y los estímulos preambientales correctos para basar su futuro en la edad adulta.